25.6.08

en el diván junto a la pared estaba sentada una bonita muchacha pálida, en un ligero vestidito de baile, con gran escote, en el cabello una flor marchita. la muchacha me miró con atención y amabilidad cuando me vio llegar; sonriente...
.
-me es imposible ir a casa; no puedo, no puedo, quiero quedarme aquí, a su lado, si es usted tan amable -le pedí-
.
me gustaba mucho, y ella era para conmigo precisamente como en este momento me convenía que fuera. me trataba con tanto cuidado como yo necesitaba, y tan burlonamente como necesitaba también...
.
-¿qué tan extraordinario te pasaba esta noche que has andado correteando por el mundo como un alma en pena? -me preguntó-
.
-me puse furioso y triste, y vi que estaba solo y nadie me entendía
.
al hacer un ademán de levantarse, se deprimió profundamente mi ánimo, tuve miedo de que se fuera y me dejara solo, y entonces volvería todo a ser como antes había sido
.
-¿vuelves?
.
-vuelvo. pero voy a decirte una cosa: cierra los ojos y duerme un poco; eso es lo que necesitas
.
*ELE

No hay comentarios.: