y de repente en esta noche cualquiera la luna quedó postrada frente a mí, enorme, como vigilante de la ciudad, aún luminosa a pesar de las nubes que la cubrían, como un velo sobre la piel blanca y resplandeciente de una mujer adorable... la luna, tan lejana y tan adentro, como el recuerdo... como tú...
27.11.07
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